En la mediana, adelfas
venenosas,
algunas amarillas, rosas y
blancas,
siembran esta alfombra
fronteriza.
La carretera divide el camino,
el de ida y el de vuelta,
según el punto de vista.
Viste este alegre traje,
un volante de gris asfalto
donde, en días tristes,
florecen
ramilletes rojos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario